Un Arquetipo es un patrón abierto que da forma a multitud de experiencias de vida siguiendo una determinada tendencia pero capaz de tomar infinitas bifurcaciones al interactuar con otros arquetipos y bajo el efecto de la conciencia. Igual que no hay un copo de nieve igual a otro y todos siguen un mismo patrón hexagonal para formarse, los arquetipos que portamos dan infinitas formas a nuestras vidas pero con una tendencia reconocible. Y nosotros, con nuestras elecciones conscientes, podemos influir en el resultado de una determinada forma, igual que Masaru Emoto demostró que se podía influenciar en la cristalización de una gota de agua aportando conciencia "positiva".
No existe un destino para nuestras vidas, pero si una linea argumental que trazan estos arquetipos. Conocer esta linea significa poder fluir con nuestra historia y realizar las elecciones de vida de una manera consciente para apoyar la creación de una experiencia vital plena y bella.
"Resiliencia". Fotografía de Delia Govantes, 2013 |